martes, 30 de septiembre de 2008

Good Bye Butch

Paul Newman es uno de mis gringos favoritos. No hay una sola película de él que no me guste. Desafortunadamente, el cáncer se lo ha llevado a los 83 años. Aquí les dejo un cachito de una de sus películas, la cual es mi favorita; Butch Cassidy & The Sundance Kid, de 1969 con Robert Redford y Katharine Ross. Como dato curioso, esta fue la primera película completa y sin dormirme que aguanté en un cine, tendría yo como tres o cuatro años. La segunda fue Bambi, pero ahí si lloré.
Descanse en paz el actor de los ojos más azules del mundo.


4 comentarios:

LUCAS dijo...

Mi estimado Zorombas:

Al igual que tú, Newman me cae bien desde que vi la pelìcula de marras en el viejo autocinema de Santa Mónica en el Estado de México. Me cayó mejor cuando lo vi con tanto entusiasmo en las carreras de autos (de las cuales yo soy un gran admirador) y saber después que se comportó atípicamente con sus parejas en la industria (sólo se casó 2 veces, ¡inaudito!), incursionó con éxito en la industria de alimentos pero sus ganancias sirvieron para patrocinar a muchos, muchos niños y finalmente, la fundación que crea en la memoria de su hijo quien fallece por abuso de drogas ahora ayuda y ayudará a quienes son brutalmente estupidizados. Se fué un gran hombre, su único defecto fué ser gringo, pero no le importó jamás.

Miguel Miranda dijo...

Mi Lucas, qué bonito comentario. Es cierto, el Newman era un tipazo, ojalá y los Damon, los Clooney o los Pitt lleguen a su edad dejando ese legado. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Los recuerdos son invenciones constantes, y un recuerdo muy profundo, reinventado por mí durante mi infancia, es la música de esta película; "Raindrops keep fallin' on my head!" fue literalmente un sonsonete que llegó a ser molesto por tanto "caer" en mi cerebro como gotas repetitivas de un estribillo constante pero irreconocible, fue en esas épocas, creo yo, cuando descubrí que en la cabeza se pueden recordar con exactitud las notas musicales, pero que resulta imposible tratar de imitarlas con la boca.
A diferencia de mi hermano, que tiene una prodiga capacidad de memoria (o una prodiga capacidad de invención, diría yo) no recuerdo cuándo vi por primera vez a este famoso personaje, lo cierto es que por las notas de "Raindrops keep fallin' on my head!" que aún suenan con exactitud en mi cabeza estoy convencida que dejó una marca indeleble en mi vida.

Miguel Miranda dijo...

Maribel, lo que pasa es que no te acuerdas, pero fue en el cine Las Américas, que estaba en Av de los Insurgentes, creo que ya no existe. Fuimos con mi mamá y mi tía miss. Marcela todavía no existía, ni proyectada estaba pues. Además, me robaste mis palomitas... nunca te lo perdonaré.